Un repelente de insectos es una sustancia que se aplica a la piel o la ropa para evitar que los insectos, como mosquitos y garrapatas, piquen o se posen en el cuerpo. Estos repelentes suelen contener ingredientes activos como DEET, picaridin o aceite de eucalipto de limón, que interfieren con los sentidos de los insectos, impidiéndoles encontrar y atacar a su presa.